Había que diferenciar 3 pasos importantes: pintar de dorado la snitch, fabricar las alas con cartulina y por último hacerle los relieves a la pelota.
Hemos utilizado rotuladores dorados y una pelota de corcho, se puede usar también una pelota de ping pong pero a la hora de clavarles las dos alas, como las hemos hecho con cartulina y con dos chinchetas, pues nos parecía más fácil clavarlas en el corcho que es más blandito.
Una vez pintada la pelota de dorado, la hemos dejado secar y nos hemos puesto con las alas.
Teníamos un par de plantillas para que todo el mundo pudiera hacer las suyas y recortarlas y después, con un punzón, hacerles un agujero para poder poner las chinchetas y así clavarlas a la pelota.
Por supuesto las alas también las hemos pintado de dorado, pero además para darles el efecto de plumas voladoras, hemos hecho varios cortes con las tijeras.
Para terminar, con un poco de silicona, cada uno ha creado un diseño para su snitch con espirales, puntitos, rayitas...
En cuanto se ha secado la silicona, hemos pintado sobre ella con dorado, marrón o amarillo para darle efecto de sombra y hacerla más realista si cabe.
Cada snitch tenía un diseño diferente y todas han quedado geniales.
Para terminar, hemos hecho un test entre todos para ver cuánto sabíamos sobre este deporte de magos, y la verdad, que lo tenemos casi controlado.
Nos vemos a la vuelta de las vacaciones de verano, con nuevas ideas, nuevos talleres y no os preocupéis si os habéis quedado sin hacer alguno de los talleres de Harry Potter, porque ¡repetiremos sin duda!
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